Traducción de documentos
En el caso de traducciones juradas es recomendable fijar cita para entregar los documentos y recogerlos posteriormente junto con la traducción.
También es posible enviar los documentos por correo electrónico y exhibir el original en el momento de retirar la traducción. Si Usted no puede recoger la traducción personalmente, podrá encargar su envío por correo tradicional, o bien, si la entidad o autoridad correspondiente acepta una traducción en soporte electrónico, la podremos enviar por e-mail, escaneada o en un archivo pdf provisto de la firma electrónica avanzada.
Ocurre a menudo que una traducción jurada (y/o el documento original) a presentar en el extranjero debe ir provista de una Apostilla obtenida previamente en el Ministerio de Relaciones Exteriores polaco. Es recomendable consultar al destinatario de documentos (entidad u organismo) extranjero para comprobar si es necesario cumplir con ese requisito.
Cada documento hace referencia a la realidad jurídica del país en que fue expedido y se basa en unas normas específicas. Obviamente, la normativa de cada país es diferente, tanto en lo sustancial, como en el plano formal. Unas diferencias importantes aparecen incluso en caso de la trasposición de la legislación de la Unión Europea a las legislaciones nacionales de cada país miembro, por no hablar de las enormes diferencias entre la legislación polaca y las leyes de los países no europeos. Por esa razón, la traducción de documentos consiste en la tarea de encontrar un compromiso más acertado entre una traducción literal de los nombres de oficinas públicas, documentos, cargos, unidades de organización etc., y el uso de sus equivalentes existentes en el país de la lengua de destino. Es muy importante que la traducción sea comprensible sin incurrir en una analogía simplificadora.